Experiencias de lectura con "El hombre del traje a cuadros de diez colores
que llegó en la carroza de los días patrios, de Carlos Kuraiem"
Segundo premio Categoría Comprensión lectora en contextos de estudio
Marta Goddio
Escuela N.°26 Adolfo van Gelderen D.E.1
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
La experiencia de lectura con El hombre del traje a cuadros de diez colores que llegó en la carroza de los días patrios, de Carlos Kuraiem (Argentina, 1956), desarrollada con 22 alumnos de 5.° grado de la escuela N.° 26 Adolfo van Gelderen, continúa el abordaje de la obra literaria del autor iniciada a comienzos del ciclo lectivo con La mirada y el vértigo, libro que reúne su poesía completa escrita entre los años 1974 y 2018.
En el marco del Proyecto Escuela “La seducción de las palabras”, y con el propósito de explorar técnicas de estudio recurriendo a diversas fuentes de información, los niños leyeron e interpretaron poemas de Presagios de Guerra, escritos en los días 2, 3 y 4 de abril de 1982, y entrevistaron al autor en la Feria Internacional del Libro. Estas actividades –utilizando el formato de “hoja suelta”– posibilitaron el abordaje de El hombre del traje a cuadros de diez colores…, novela publicada por primera vez como “folletín” en el suplemento literario “El Ángel de Virrey del Pino” a fines de los años noventa.
El aula cambió: las paredes se poblaron de imágenes, consignas de trabajo, preguntas e hipótesis. De la mano de un alumno llegó al aula el libro de poemas de Ana María Ponce, desaparecida en 1977. La lectura habilitó la comparación de criterios de edición y la contextualización histórica de la novela de Kuraiem escrita entre 1978 y 1983.
La dinámica desarrollada en esta propuesta desafió la rutina de recorrer el camino impuesto por los libros de textos escolares para cumplir con un programa de estudios. Por el contrario, se propuso incentivar la exploración de las competencias y potencialidades de oralidad y lectura así como también la búsqueda y apropiación de estrategias y habilidades para pensar por cuenta propia, conocer, expresar y fundamentar ideas apelando a criterios elaborados cada vez con mayor nivel de autonomía sin descuidar la creación estética, sin perder la emoción de una experiencia directa personal tanto individual como colectiva y concibiendo a la escuela como escenario para la construcción de ciudadanía.
El proyecto generó un espacio lúdico de constante motivación para desarrollar expresiones artísticas al tiempo que se articulaba y profundizaba el estudio de contenidos de otras áreas. Despertó en unos las ganas de escribir, en otros las de leer actuando. Animó a los más tímidos a leer para uno mismo y para otros, asumir el rol del narrador o de alguno de los personajes, mejorando la calidad de los vínculos y de la convivencia. Los alumnos desarrollaron estrategias para abordar el estudio de obras literarias y establecer conexiones con otras disciplinas para ampliar su campo de conocimiento.